ESTRATEGIAS PARA MEJORAR LA LECTURA
La dislexia es un trastorno específico del aprendizaje que causa dificultades para leer, escribir y, a veces, para las matemáticas…
Las dificultades en el aprendizaje suelen afectar habilidades específicas como la lectura, la escritura o las habilidades matemáticas. A pesar de poseer una inteligencia normal o superior a la media, las personas con dificultades académicas requieren de un mayor esfuerzo para retener o poner en práctica dichas habilidades en diversas áreas, aun cuando hacen un enorme esfuerzo, Algunas dificultades comunes incluyen la dislexia (lectura), disgrafía (escritura), discalculia (matemáticas).
Las dificultades en la lectura son problemas persistentes para leer palabras o comprender un texto, a menudo estas dificultades se relacionan con trastornos como la dislexia, que afecta la decodificación de palabras y la asociación de sonidos con letras.
La dislexia es un trastorno específico del aprendizaje que causa dificultades para leer, escribir y, a veces, para las matemáticas, sin estar relacionada con la inteligencia o la motivación del estudiante. Se debe en efecto a que el cerebro no procesa adecuadamente el lenguaje, afectando la habilidad de conectar sonidos con letras (decodificación).
Los síntomas pueden incluir problemas para identificar sonidos, problemas para pronunciar palabras, lectura lenta, mala ortografía, dificultad para entender lo leído o problemas para leer en voz alta.
Los problemas relacionados con la lectura se pueden diagnosticar con pruebas de memoria, lectura y comprensión. La evaluación del aprendizaje es un proceso sistemático para recopilar, analizar y utilizar información sobre lo que los estudiantes saben y pueden hacer con lo que han aprendido, así como sobre los procesos y contextos que facilitan o dificultan su aprendizaje.
La evaluación del aprendizaje va más allá de la simple calificación y se enfoca en comprender el progreso y las necesidades de los estudiantes, así como la efectividad de los métodos de enseñanza. Utilizando diversas estrategias, como pruebas, observaciones, proyectos y debates, para obtener datos sobre el aprendizaje de los estudiantes.
Es fundamental una intervención temprana para mejorar las habilidades básicas y la confianza del lector, evitando obstáculos mayores. Permitiendo a los docentes tomar decisiones informadas para mejorar la práctica pedagógica y el aprendizaje de los estudiantes.
Aplicando los hallazgos de la evaluación para adaptar la enseñanza, proporcionar retroalimentación efectiva y tomar decisiones pedagógicas informadas que optimicen el aprendizaje.
Para mejorar la lectura y comprensión, una estrategia útil es hacer que el estudiante lea en voz alta para mejorar fluidez, hacer pausas para hacer predicciones y hacer preguntas sobre el texto. Luego hacer un resumen o crear un mapa conceptual para sintetizar la información. Otras técnicas incluyen la identificación de la idea principal, el uso de la visualización, la conexión con conocimientos previos y la ampliación del vocabulario mediante la búsqueda de sinónimos y antónimos.
Estrategias de lectura activa:
Práctica diaria: Leer regularmente y de forma constante y sistemática para mejorar tu habilidad.
Variedad de lecturas: Leer diferentes tipos de textos: libros, artículos, revistas y ensayos para mantener el interés y la práctica.
Eliminar distracciones: Buscar un lugar tranquilo para leer y concentrarse en la tarea.
Tomar descansos: Tomar descansos regulares durante la lectura para mantener la concentración y la energía.
Lectura en voz alta: Leer en voz alta para mejorar la fluidez y procesar mejor la información, lo que aumenta la concentración.
Preguntas sobre el texto: Durante la lectura, es importante hacer preguntas sobre lo que está leyendo, o inventar preguntas para otros, como ¿cuál es el problema de la historia?.
Predicciones: Detenerse y tratar predecir qué sucederá a continuación en la historia o qué tema se tratará en el siguiente párrafo.
Visualización: Intentar imaginar lo que se lee. Crear un mapa conceptual o un dibujo que represente la información que ayude a recordar y comprender la lectura.
Conexión con lo aprendido: Relacionar lo que está leyendo con sus conocimientos y experiencias previas para enriquecer la comprensión.
Subrayado y anotación: Subrayar las ideas principales y anotar al margen las partes relevantes o las propias ideas sobre el texto.
Resumen y síntesis: Después de leer, puede ser útil hacer un resumen del texto, ya sea de forma escrita o contándolo en voz alta.
Búsqueda de vocabulario: Buscar en el diccionario el significado de palabras que no entienda, además de buscar sus sinónimos y antónimos para ampliar su vocabulario.
Ordenar secuencias: Lee una historia breve y luego ordena las escenas en orden cronológico.
Crear historias: Inventar un final para un cuento, o convertir el texto en una canción o en una obra de teatro.
Resumen:
Las dificultades en el aprendizaje suelen afectar habilidades específicas como la lectura, la escritura o las habilidades matemáticas. A menudo estas dificultades se relacionan con trastornos como la dislexia. La dislexia es un trastorno específico del aprendizaje que causa dificultades para leer, escribir y, a veces, para las matemáticas. Los problemas relacionados con la lectura se pueden diagnosticar con pruebas de memoria, lectura y comprensión. Aplicando los hallazgos de la evaluación para adaptar la enseñanza.